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La clasificación de cada empresa se da de acuerdo a la actividad principal de la misma. Generalmente, esta es definida por el empleador y la entidad administradora de riesgos profesionales al momento de la afiliación.
Si sucede que una organización, tiene más de una sede de trabajo, así mismo tendrá diferentes focos de riesgo, por lo cual, debe haber una distinción clara en la actividad que desarrolla, en sus instalaciones y en la exposición a los diferentes factores de riesgo ocupacional según sea el caso.
Además, realizar las cotizaciones de los trabajadores, es una de las responsabilidades más importantes de las empresas, al igual que la presentación de su relación con ellos ante la ARL con el fin de que esta, cumpla con el pago de las prestaciones a las que tienen derecho los colaboradores en caso de un accidente o riesgo laboral.
A partir de la normatividad que establece el gobierno colombiano, existen cinco clases de riesgo para clasificar una empresa según su actividad económica. Cada una de ellas, cuenta con un valor mínimo y máximo de cotización. Veamos:
¡Conoce la tabla de cotizaciones mínimas y máximas!
Con el fin de evitar sanciones legales, el empleador debe reportar el Ingreso Base de Cotización (IBC) y la clase de riesgo correcta de cada uno de sus trabajadores.
Si tienes dudas respecto a la clasificación de tu empresa, ponte en contacto con nosotros en el 322 06 22 y te asesoraremos con todos tus requerimientos.